Remsa y Bórax Argentina firmaron un convenio de desarrollo local
El contrato se basa en la provisión de 50.000 m3 diarios de gas a Tincalayu, paraje cercano a San Antonio de los Cobres. La empresa minera podrá trasladar su planta al lugar donde extrae el mineral.
En un acto realizado este viernes, autoridades de Recursos Energéticos y Mineros Salta (Remsa) y directivos de la empresa Bórax Argentina rubricaron un convenio de desarrollo local que prevé el suministro de gas en Tincalayu (San Antonio de los Cobres), basado en 50.000 m3 diarios.
Por parte de la empresa firmó el acuerdo Fernando Cornejo, gerente general de Borax Argentina y por Remsa, su presidente Armando Isasmendi.
La concreción del contrato tendrá un impacto positivo en lo vinculado al medioambiente al tiempo que fortalece las condiciones para la inversión minera, intereses fundamentales que forman parte de una decisión estratégica del Estado.
“En ese contexto se trabajó intensamente en los últimos años suministrando gas mediante estos contratos cumpliendo con los objetivos de cooperar con la inversión privada y cumplir con nuestra misión de ser facilitadores y articuladores entre el sector público y el privado”, afirmó Isasmendi.
Fernando Cornejo adelantó que la compañía tiene previsto en mayo iniciar sus operaciones en el lugar. “Estamos muy contentos porque se concretó este convenio, que nos posibilitará trasladar nuestra planta de bórax de Campo Quijano al yacimiento Tincalayu, que es el lugar donde se extrae el mineral”.
“En un corto plazo podremos contar con gas, que será un gran apoyo para nuestra operaciones” recalcó Cornejo.
Con esta acción se logra atraer y ayudar la inversión minera que básicamente se nutre del gas para generar energía más eficiente, un dato que ha sido tomado en cuenta en la valoración realizada por el Instituto Fraser, a través de su encuesta anual sobre la actividad, en donde Salta obtuvo por tercera vez consecutiva el mejor índice del país del “potencial de políticas mineras”, posicionándose como la provincia más atractiva para invertir.
“Esa valoración se relaciona también con la seguridad pública y privada, con la facilidad de darle el marco legal a la empresa para que invierta y el punto estratégico es la energía”, concluyó Armando Isasmendi.